Si quieres que los niños se alimenten adecuadamente tienes que conseguir que la comida se convierta también en diversión: ponle nombres divertidos a frutas, dibuja caritas con ellos, y sobre todo deja que los niños participen en la cocina.
En verano las fruterías están llenas de color con frutas de todo tipo y es un buen momento para que los niños adquieran el hábito de consumirlas, una forma fácil de iniciar el hábito es que coman frutas en los postres. Además, juntos pueden disfrutar el momento de prepararlo y por supuesto de saborearlo.
Prueba con alguno de estos deliciosos postres, a los peques les encantarán:
Helado banana split
Paletas heladas de fruta
Fresas con crema
Duraznos en almíbar
Jicaletas
Texto publicado en revista Cableguía, julio 2010 Año V Núm. 55
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